miércoles, 27 de junio de 2007

Dia 2: Sofía


El día de hoy, amanece soleado y como es Domingo, las calles y los parques estan llenas de gente, por lo que decidimos pasar el día en el centro paseando y parando de vez en cuando a refrescarnos con una cerveza, porque hace un calos sofocante, igual que en España.


Las calles adyacentes a la zona centro estan repletas de puestos de fruta y de vendedores ambulantes, que dan un colorido fascinante, ya que los puestos estan llenos de cerezas, fresas, frambuesas...






















Tambien aprovechamos para visitar las iglesias ortodoxas por dentro, ya que los domingos ya se sabe, hay misas, y la verdad, son impresionantes, los frescos, la iluminación, el olor, además del como celebran la ceremonia, es muy distinto a las de aquí, en el interior de las iglesias, no existen los bancos para sentarse, ni el altar como aquí lo entendemos, allí en sacerdote oficia la misa, y todo el mundo se pone donde quiere, rodeandolo, y éste a su vez se mueve por varias direcciones, cantando casi toda la celebración, curioso.




Despues de visitar las iglesias, nos dirigimos a la zona donde se encuentra el Palacio Presidencial, y la zona administrativa del país por si hay suerte y vemos el cambio de guardia de la puerta principal, y si que la hubo, pudimos ver como eran relevados los soldados que estaban en la puerta del Palacio.

Despues de eso, decidimos que era hora de sentarnos a disfrutar de las esplendidos jardines y de sus terrazas con una cerveza bien fría, y así poder relajarnos hasta la hora de comer.

Tanto para comer como para cenar, se puede ir a cualquier sitio, sobre todo los Bulgaros comen sobre todo, ensaladas, pasta, carne de cerdo y de pollo, pero pescado poco, así que donde fueres haz lo que vieres. El vino también esta bastante bueno.

Después de algunas compras, nos fuimos de nuevo al hotel, donde nos esperaba ya el coche de alquiler para el resto de semana, que préviamente habíamos alquilado en el aeropuerto de Sofia.
Era un Opel Zafira, y la verdad es que para cinco personas con sus respectivos equipajes es muy comodo y amplio, pero nos costo 475€ por seis días.

Día 1: Vuelo Alicante-Madrid-Sofia 2 de junio

Son las seis de la mañana y nos disponemos a coger un avión desde Alicante a Madrid, con la compañía Iberia(90€ ida y vuelta), hasta la T-4, y de allí cogemos el bus hasta la T-1 donde tendremos que facturar las maletas, ya que volamos con la compañía Bulgaria air (290€ ida y vuelta).

Desde Madrid salimos sobre las 12.00 hora española y llegamos a Sofía unas tres horas y cuarto mas tarde sin ningún problema, tan solo es que el avión es muy pequeño y las distancias entre asientos demasiado cortas, menos mal que no es mucho tiempo.
Una vez llegados a Sofía y recogido el equipaje, hay que tener en cuenta que hay que cambiar en LEBAS, la moneda del país (1€-1.95 Lv dependiendo del cambio diario). Mi consejo es que en el aeropuerto no cambiéis muchas, ya que el cambio esta muy caro (1.65Lv-1€), tan solo para pagar el taxi que os lleve al hotel.
En cuanto al taxi, coged los de color amarillo en el que pone las palabras OK, que son los que utilizan el taxímetro y están controlados por las autoridades. Nosotros lo deconociamos y nos subimos a uno de esos piratas, y nos cobró 10€ por llevarnos al hotel, cuando lo normal es que cueste unas 7 o 10 Lv, o sea, unos 5€.
El hotel donde nos alojamos se llama Hotel Hemus(www.hemushotels.com), y es un edificio bastante alto, relativamente cerca del centro, y que cuesta 36€ por habitación doble, y 32€ la simple con desayuno buffet, no esta mal, es limpio, pero sin lujos y tiene unas vistas de la ciudad acojonantes.

Sofía es una ciudad muy bonita, con muchos parque y jardines, mucho arbolado, y tiene bastante ambiente. La gente es muy amable y no dudarán en acompañaros hasta donde haga falta si no os saben explicar alguna dirección en inglés.
La zona centro, sobre todo la zona del Parlamento, el Palacio Presidencial, el Teatro Nacional, es especialmente bonita, con calles adoquinadas, jardines, donde también se encuentran la Iglesia Rusa y la Catedral de Alexander Nevsky, y donde la gente de la ciudad pasea y toma algo en las innumerables y encantadoras terrazas que por todo el país nos iremos encontrando.
A la hora de comer o cenar, en cualquiera de los restaurantes del centro, se puede comer muy bien y bastante barato, alrededor de unos cinco euros por persona con todo, bebida, postre, etc, las pizzas están especialmente buenas, y vereis puestos de pizza ambulante con unas enormes, y donde la porción puede costar unos 0.50€.
Hay bastante ambiente por la noche, y muy bueno, dejaros llevar donde haya gente y ya está. Cerca del Hotel hay un subterráneo, donde existe una galería comercial y hay dos discotecas que están muy bien y con buen ambiente. Lo de los cubatas allí no lo llevan muy bien, y por supuesto el ron, casi imposible.
Las copas si que se pagan bastante caras, casi como aquí o incluso algo más.

El viaje

Iniciamos el viaje un grupo de cinco amigos por este país balcanico, que nos llevó a través de él durante ocho días, en un coche de alquiler, haciendo escala en diferentes ciudades, de lo mas representativo del país.
anduvimos entre montañas cubiertas de bosques, recorrimos castillos medievales, atravesamos llanuras llenas de cereal y vid, nos bañamos en el mar negro, vimos un espectaculo en un anfiteatro romano, en fin, aunque por supuesto nos dejamos muchas cosas sin ver, ocho días no dan para conocer un país, pero sí para llevarte una pequeña impresión de la cultura y de sus gentes.